CONOCER, ESTUDIAR Y COMPRENDER LAS OBRAS DE ARTE

Conocer, estudiar y comprender las obras de arte..

El estudio de las artes plásticas puede enfocarse desde diferentes puntos de vista. Uno de los más habituales generalmente es el histórico, es decir, el conocimiento por parte de la obra artística desde una perspectiva sociocultural, económica o religiosa de la época que la vio nacer. Otro es el bibliográfico, con las fechas claves y significativas tanto del autor como de la obra en si misma, que nos permite entender y valorar mejor los posibles cambios de estilos y las etapas que se llevaron a cabo para su producción.

En un plano más técnico, otra posibilidad es conocer los procedimientos artísticos que fueron empleados para su creación, por ejemplo: es muy importante no confundir y poder saber distinguir entre una pintura al oleo de otra al temple, o lo que diferencia las técnicas secas de las grasas dentro de los medios que utilizan el papel como soporte.

Así, se puede concluir entonces que el estudio de la obra de arte es una disciplina que entra de lleno en el terreno del conocimiento, aunque debemos de advertir que existen otros diversos aspectos del arte, que escapan a una simple recopilación de datos, y entran en ámbitos de difícil valoración como la objetividad ante la visualización de cada una de ellas, atendiendo con ello a la propia sensibilidad del artista o su gusto.

Además de los enfoques ya nombrados, otra forma de poder acceder al arte es intentar verlo siempre mediante una observación minuciosa, dejando ya de lado todos los conocimientos que de la obra contemplada podamos tener y que de una manera u otra, condicionan siempre nuestra visión, y debemos comenzar a comprenderla en su totalidad.

Comprender el arte, significa saber identificar la luz de un atardecer en por ejemplo paisajes de Camille Corot o sentir que los caballos esculpidos por Fidias en el Partenón adquieren fuerza y movimiento, oliendo el polvo que levantan sus cascos. La comprensión implica entonces, un dialogo más personal e intimo con la obra; así, la lectura de una obra de arte consiste en dotar de significado los estímulos generados por su contemplación, y poder analizar mediante la observación a la obra de arte, mediante su color, la luz, forma, movimiento, espacio, composición, proporciones, tensión, entre otros. Dentro de estos ya nombrados, durante este recopilado de información, abordaremos sobre dos de ellos, y que a mi criterio juegan un papel importante al momento de analizar, y de observar a simple vista una obra de arte, como lo es el color, luz y composición.